Observatori Fabra
Observatori Fabra, la luz de las estrellas.
Cerca de la cima del Tibidabo, con vistas a toda la ciudad, se encuentra el Observatori Fabra. El cuarto observatorio astronómico más antiguo del mundo en funcionamiento y uno de los edificios emblemáticos que debes incluir en tu ruta nocturna por Barcelona.
Pertenece a la Reial Acadèmia de Ciències i Arts de Barcelona (RACAB) y se le puso este nombre en honor al mecenas que hizo posible su construcción, el industrial y marqués de Alella, Camil Fabra.
La RACAB instaló 2 observatorios encima de su sede, situada en La Rambla, pero no se pudieron usar debido a la contaminación lumínica. Así que en 1984 puso en marcha el proyecto del nuevo Observatori del Tibidabo y lo inauguraron el año 1904.
Desde sus inicios, estudia y recoge datos relacionados con la meteorología, la astronomía y la sismología. En la actualidad, su actividad científica se centra en la observación de estrellas dobles y el estudio de asteroides y cometas. Además, participa en programas internacionales coordinados por el Minor Planet Center y el Observatorio de Pulkovo.
En la sala de la gran cúpula del Observatori Fabra podrás observar constelaciones lejanas, estrellas y gran parte del sistema solar con el telescopio de 1904, uno de los más grandes y antiguos de Europa que sigue en funcionamiento.
Durante los últimos años, ha recuperado el papel de centro divulgador realizando charlas sobre astronomía y visitas guiadas diurnas y nocturnas a sus instalaciones, para ver el museo, la terraza de su cúpula y el funcionamiento de sus dos telescopios centenarios.